Ahora, Christie ha progresado a través de los niveles de atención en CNS, pasando de nuestro programa residencial para pacientes internos en Dallas a asistir a tratamiento diurno en nuestra ubicación de Austin. Christie ha comenzado sesiones de terapia de preparación para la vuelta al trabajo cada semana. A través de tareas de trabajo asignadas en su ordenador, Christie está fortaleciendo su destreza al teclear, su velocidad de reacción y sus capacidades cognitivas multitarea.
"Una de las cosas más destacadas del CNS es que te diseñan un programa sobre lo que quieres conseguir", dice Christie, que espera volver a trabajar algún día.
Christie ha vuelto a vivir con su comprensivo y cariñoso novio, Gatlin. Juntos disfrutan de la jardinería y de pasar tiempo con su pastor australiano, Cali. Está entusiasmada con la idea de seguir con la terapia y volver a su estilo de vida activo, en el que viajaba y practicaba submarinismo antes de lesionarse. En mayo, Christie asistió al Austin Heart Ball de la American Heart Association, una gala anual que rinde homenaje a los supervivientes de accidentes cerebrovasculares y sensibiliza sobre la salud del corazón. A pesar de sus temores iniciales, Christie ha recuperado la dignidad y la esperanza en las posibilidades que le esperan.